Caro y Alejo

Caro y Alejo querían una rumba para su boda. Y sí que se la gozaron y se la rumbearon hasta el final. Ellos mismos se encargaron de cada detalle de su boda, hasta las botellitas de las mesas las hicieron. Fue un sábado día del amor y la amistad, más perfecto no podía ser, pues el amor se desbordaba entre ellos dos y los acompañaron más de 100 amigos y familiares a celebrar. Hizo un día muy lindo y la locación, tanto de la casa de los novios, la iglesia y la fiesta se prestó para unas fotos geniales.

Alejo estuvo acompañado por Alejandro Mejía Restrepo, la segunda cámara, desde la barbería, entre cervezas y recocha con sus amigos pasaron un rato muy agradable. Yo acompañé a la novia y su familia.

La ceremonia fue en Camino de Emaus en El Retiro y la recepción en Los Caballos.